El nuevo sustantivo

    Desde la llegada del COVID-19, la vida cotidiana se ha visto transformada en una gran cantidad de aspectos, incluyendo la manera en que nos comunicamos y nos relacionamos. Antes de la pandemia, genuinamente creo que nunca había realizado una videollamada para algo que no sea hablar por Whatsapp con algún familiar. Debido a la necesidad de mantenerse interconectados durante la cuarentena, y para aproximarse lo más posible a una reanudación de las actividades sociales a distancia, el uso de plataformas de reunión virtual como Zoom, Skype, Google Meets y Microsoft Teams se transformó rápidamente en uno de los pilares fundamentales de nuestro día a día durante la pandemia, tornándose infaltables dentro de la nueva realidad que se estaba viviendo. Como consecuencia, estas plataformas experimentaron un crecimiento exponencial de sus bases de usuarios. En el caso de Zoom, la empresa vió un aumento del 355% en sus ingresos durante el segundo trimestre de 2020 en comparación con el mismo período del año anterior.

El día 5 de mayo de 2023, la Organización Mundial de la Salud declaró oficialmente el fin de la emergencia sanitaria global por el virus COVID-19. Sin embargo, muchos de los hábitos instaurados durante el período de distanciamiento social han logrado perdurar en el tiempo, arraigándose en nuestras rutinas y redefiniendo lo que compone la cotidianidad. Si me hubieran preguntado hace cinco años si la mayor parte de mi semana de receso universitaria me la gastaría sentado en mi escritorio y conectado en una videollamada con otros compañeros para hacer un trabajo, se me hubiera hecho difícil de creer. A pesar de todo, el uso de zoom ha trascendido la pandemia y ha encontrado su lugar en el desarrollo de nuestras actividades académicas en un contexto post distanciamiento social. 

Algo que me llama mucho la atención es que, debido a la popularidad de esta plataforma, el término "Zoom" ya no solo se refiere a la herramienta tecnológica, sino que ha adquirido una nueva dimensión como sustantivo en sí mismo. Ahora, no es raro escuchar frases como "vamos a hacer un Zoom" o "nos vemos en el Zoom", donde la palabra se utiliza como sinónimo de "reunión virtual". Este fenómeno lingüístico es un claro ejemplo de cómo las palabras pueden adaptarse a los cambios sociales y tecnológicos, y cómo las nuevas formas de comunicación pueden transformar nuestra manera de expresarnos.

Zoom. Fuente: Fueracódigos

Esto me hace pensar acerca de cómo hubiera sido cursar este ramo (y por ende, realizar esta investigación) antes de que las reuniones virtuales tuvieran el protagonismo que tienen ahora. Como grupo nos juntamos casi todos los días (y por varias horas) a trabajar en nuestra investigación. Tenemos muy normalizado el tomar cada espacio de tiempo libre que tengamos y reunirnos a trabajar como grupo y no puedo imaginarme cursar este ramo sin estas herramientas. Esto también me hace reflexionar sobre las herramientas que tenemos a nuestra disposición y cómo nos ayudan al momento de realizar actividades como esta. 

M.L.